T oda película guarda un detrás de escena y “Dirty Dancing” no escapa a esto, porque la magia que se construye uniendo diversas tomas hace que esas imperfecciones sean ocultadas. Las cuales iremos develando una a una.*

Dirty Dancing o Baile caliente es una película romántica estadounidense estrenada el 24 de septiembre de 1987, escrita por Eleonor Bergstein, dirigida por Emile Ardolino y protagonizada por Patrick Swayze y Jennifer Grey.
Película icónica de los años ´80 que narra el amor entre Baby, una joven inocente y con un pensamiento altruista, que se enamora de Johnny, un profesor de baile latino, durante el verano de 1963 en Kellerman’s, un exclusivo resort de Catskills.

Si bien, esta historia forma parte de los films que marcaron una generación y fue furor en los cines de todo el mundo, algunas cosas han salido a la luz con el paso de los años.
En principio, como varios lectores y cinéfilos sabrán, la elaboración de una película no es cosa para sonsos sino que significa una gran aventura que no todos están dispuestos a emprender. Y este fue el caso de Emile Adorlino, la escritora de la historia sobre la que se basa esta película. La realidad es que Baile Caliente no fue bien recibida por las productoras de la época, quienes no querían embarcarse en el rodaje de una historia que no prometía grandes ganancias, sino por el contrario pérdidas monetarias invaluables. Finalmente, Vestron, una pequeña empresa, se interesó en este escrito dando inicio a la verdadera peripecia.
Una de las etapas clave era la selección de los protagonistas de esta gran película, un casting con gran convocatoria entre los que participaron Billy Zane, Val Kilmer, Sarah Jessica Parker y Sharon Stone y dos personas que hipnotizaron a sus espectadores: Patrick Swayze y Jennifer Grey. Ambos cumplían los requisitos para convertirse en los hacedores de esta ficción romántica, sin embargo frente a cualquier parecer su relación era bastante tensa. Esto se debía a que anteriormente habían protagonizado un film que les había generado varios malos tragos y malas relaciones. Pero no pudieron negarse a la participación de lo que sería posteriormente, una obra de arte del cine hollywoodense.
Comenzando ya con la filmación, la relación no iba mejorando, pero ¡si, existía algo que ayudaba a este rodaje! Y era que ambos actores eran muy profesionales. A pesar de ello, las pequeñas fisuras de esta pareja pueden verse en la cinta. Por ejemplo, la escena de ensayo de baile en que el protagonista pone cara ofuscada cuando la actriz comienza a reír al momento en que rosa su brazo es conservada, generando una naturalidad que la directora no quiso eliminar.

Spoileando un poco el final, nada más hermoso que la imagen culmine que muchos recordarán o tendrán en mente. Esa toma continuada en que solo un salto de Baby sobre los brazos de “Johnny” hace que se convierta en una de las escenas más recreadas por posteriores series y películas. Una destreza de baile que Jennifer debía realizar con bastante temor y que su partener prometió no dejarla caer. Asimismo, la canción que le da el tono triunfante, como así también su banda sonora, rompió records de venta en todo el mundo. Es que ¿quién no puede ponerse a bailar o deleitarse frente al paneo final de baile?
Finalmente, frente a lo que todos creían que sería y todo lo que posteriormente fue, no puede dejar de pensarse que el cine y las películas tienen esa magia que produce que se quiebre toda futurología, porque si de gustos se trata, los espectadores sorprenden a cada paso.

*(fuente the guardian)*