5 escritores que comenzaron siendo periodistas
El 7 de junio se conmemora en Argentina el Día del Periodista y aunque es una celebración netamente local porque remite a la publicación del primer periódico patrio, La Gazeta, desde aquí decidimos realizar una selección de escritores que iniciaron su carrera en este noble oficio.
Aquí vamos:
Gabriel García Márquez (1927-2014): Antes de conmover al mundo con sus Cien años de Soledad, el colombiano trabajaba en el periódico que, años más tarde, comenzaría a publicar sus primeras historias. Cuentan por ahí que una vez Gabo fue enviado a cubrir una protesta a la ciudad de Quibdo, que al llegar la ciudad estaba en una desesperante calma, por lo que se vio obligado a “recrear” una manifestación para no volver a la redacción con las manos vacías.
Isabel Allende (1942): Fueron sus años como reportera los que le permitieron desarrollar esa capacidad absoluta para investigar sobre un tema. Es ella misma quien atribuye a sus experiencias como entrevistadora su habilidad para la construcción de sus personajes hasta en sus matices.
Alfonsina Storni (1892-1938): “Un libro quemado” es la obra que recupera sus columnas escritas entre 1919 y 1921 publicadas en distintos periódicos y revistas. En ellas Alfonsina expresaba sus inquietudes acerca de los derechos de las mujeres y abogaba por la igualdad de género. Lo hacía muchas veces bajo el seudónimo de Tao Lao.
Robert Arlt (1900-1942): En sus inicios habitó la Sección Policiales del Diario Crítica, de Natalio Botana. Pero fue su paso por “El Mundo”, el que más caló en él. No solo porque allí trabajo 14 años, sino porque además fue donde vieron luz sus simbólicas “Aguafuertes”
Ernest Hemingway (1899-1961) Como a su vida entera, este genio le puso al periodismo el cuerpo y el alma, y a diferencia de otros nunca abandonó esa dualidad, y aunque cruzaba de una vereda a otra, nunca dejaba de afirmar que cuando el periodismo lo asfixiaba, su otra pasión hibernaba.
“Un periódico es una máquina de tragar textos que nunca, nunca da respiro a quienes estamos encargados de alimentarla”
- por Georgina Pepe