El padre del Psicoanálisis
Sigmund Freud, de nacer en una familia humilde y trabajadora, a convertirse en un referente mundial de la Psicología y del pensamiento contemporáneo.
Nació el 6 de mayo 1856 en la actual Republica Checa y en sus primeros años de vida se trasladó con su familia a Viena para intentar reflotar el negocio de lanas de su padre. Pese a atravesar una infancia con muchas carencias económicas, gracias al esfuerzo de sus progenitores, recibió una buena educación formal y hasta ingresó a la Universidad de Medicina a los 17 años.
Su gran capacidad de estudio le permitió profundizar en distintas ramas del conocimiento de manera autodidacta, al punto que aprendió a hablar español para leer los textos de Miguel de Cervantes.
Freud se caracterizó, en su vida profesional, por tratar de utilizar cierta sustancia para curar a sus pacientes, algo que con el tiempo descartó por considerarlo infructuoso y peligroso. Además, abrió una clínica para realizar sus prácticas de hipnosis y catarsis, aunque también abandonó estas técnicas para dar paso a la asociación libre, base del Psicoanálisis.
Freud publicó en 1900 “La interpretación de los sueños” y en 1905, “Tres contribuciones a la teoría sexual”, sus dos obras más importantes.
Debido a la incomprensión de sus teorías, Freud debió esperar varios años para ser reconocido por sus colegas, que con el tiempo lo ubicaron el lugar del “Padre del Psicoanálisis”.
Con su organismo muy deteriorado por un cáncer, a raíz del consumo de tabaco, falleció el 23 de septiembre de 1939 y sus restos se encuentran en Londres.
Foto: Ministerio de Cultura de la Nación
- por Ricardo Douna