Elon Musk vaticinó que la inteligencia artificial superará al humano más sabio
El multimillonario habló en una entrevista sobre la AGI, el salto que pondría a esas tecnologías por sobre las capacidades no mecanizadas.
Uno de las tantísimas áreas de interés de Elon Musk es el desarrollo de la inteligencia artificial. En rigor, sus actividades en Tesla, Neuralink e incluso en la red social X involucran a esas tecnologías.
Además, el multimillonario fue uno de los fundadores de OpenAI y recientemente lanzó su propio grupo en ese ámbito.
En una conversación con Nicolai Tangen, un ejecutivo de origen noruego, Musk abordó diversas temáticas, desde fallas en Twitter, la red social que rebautizó con el nombre X; pasando por conflictos sindicales en Tesla; hasta los avances en el campo de la inteligencia artificial.
Respecto al último punto, el magnate vaticinó que una AGI —siglas de inteligencia artificial general— no tardará mucho en llegar “Si la definimos como más inteligente que el ser humano más inteligente, creo que probablemente sea el próximo año o dentro de dos”, sostuvo Musk
Además, comentó que el despliegue de nuevos sistemas de IA está limitado por el suministro de electricidad y que la escasez de chips avanzados obstaculiza el entrenamiento de su propio sistema, denominado Grok. Incluso con tales desafíos, señaló que la segunda versión del chatbot de su empresa xAI saldrá al ruedo en mayo.
La diferencia entre la IA y la AGI
La segunda sigla hace referencia a la inteligencia artificial general, que supone la emergencia de un ser artificial autoconsciente, con capacidades superiores a las nuestras.
La AGI sería capaz de comprender, aprender y aplicar conocimientos de un modo similar a como lo hacemos los humanos. Así, se adaptaría para realizar diferentes tareas, incluso sin haber recibido entrenamiento específico. En tanto, la principal diferencia entre IA y AGI es la posibilidad de la segunda de abordar múltiples acciones —incluso las de carácter abstracto— y no solo ejecutar algoritmos programados previamente.
- por Georgina Pepe