El informe encontró una conexión que determinó que 20 minutos de música en directo son suficientes para que nuestra sensación de bienestar incremente en un 21%. El estudio va más allá y asegura que incrementar nuestro bienestar puede aumentar nuestra esperanza de vida en nueve años.

Los investigadores estudiaron el comportamiento de los participantes en el estudio en varias situaciones. Para ello se hicieron tests psicológicos y análisis de las pulsaciones de los participantes durante varias actividades relacionadas con el bienestar como ir a conciertos, practicar yoga o pasear al perro. Los resultados mostraron que asistir a conciertos incrementaba las sensaciones positivas en un 25%. Este tipo de actividad también incrementaba en un 25% la sensación de estar más cerca de los demás y en un 75% la estimulación de la mente.

“Nuestra investigación muestra el profundo impacto que tienen los conciertos en en los sentimientos de salud, felicidad y bienestar. La clave es asistir a ellos de forma regular. Por lo que podemos llegar a la conclusión de que asistir a un concierto cada 15 días podría alargar nuestra esperanza de vida en casi 10 años”,afirma el responsable del estudio.