El conflicto se produce cuando la persona que observa la escena de alguien conocido desarrollando una actividad, piensa que tendría que haber estado allí y experimenta sentimientos de exclusión.

La sensación de que otros se están divirtiendo mientras uno permanece inactivo en una habitación mirando el celular, genera ansiedad y malestar. Y al contrario de lo que se desearía, es un fenómeno que padecen casi dos tercios del total de usuarios de las redes sociales en el mundo.

Por un lado tenemos a aquellos que se retratan compulsivamente, un poco también por ser nativos digitales y haber crecido bajo la curva de desarrollo de los smartphones que posibilitan múltiples funciones. Pero por otro lado, tenemos a estas personas que sienten que de alguna manera se están perdiendo la vida mientras miran las fotos de los demás.

¿Cómo sé si estoy padeciendo FOMO? Produce altos niveles de ansiedad, estrés y la tensión que genera el hecho de intentar estar en varios lados al mismo tiempo trae aparejado síntomas físicos como dolor de cabeza, palpitaciones, sudoración e insomnio. Además, aparecen sentimientos de soledad y baja autoestima en la proyección que se ejerce sobre el entorno al sentirse excluido.

¿Qué podemos hacer para no sentirnos así? Desconectar por momentos de las redes sociales, practicar ejercicios para la atención y gestionar encuentros con amigos de manera presencial.

¿Conocías la existencia de este fenómeno?