Estudios comprueban que entre el 30% y el 50% de las personas lo padecen cuando intentan hacer cosas relajantes, lo que provoca síntomas de estrés como palpitaciones o transpiración.

1. Estás negando que estás estresado de Fingir que un problema no existe, también conocido como negación, es una de las estrategas de afrontamiento menos efectivas para el estrés. En el caso de relajar el estrés, esto podría ser negar que estás estresado para empezar. Los períodos breves de negación pueden ayudarnos a adaptarnos al cambio. Por ejemplo, la negación puede ayudar a una persona a sobrellevar sus emociones después de experimentar la muerte de alguien cercano. Pero cuando la negación se usa con frecuencia para lidiar con los factores estresantes diarios, puede hacer que las personas se sientan perpetuamente atrapadas en una rutina. Cuando estás en la etapa de negación, el cuerpo continúa enviando señales de estrés para incitarte a tomar medidas y resolver tus problemas. Esta es la razón por la que intentar (y fallar) relajarse en lugar de abordar las causas de su estrés puede hacer que la persona se sienta más estresada. Tips para tener a mano Reconozca que los síntomas del estrés pueden ser útiles. Tu cuerpo está tratando de alertarte de que es necesario solucionar un problema, por lo que está activando todos sus recursos fisiológicos para ayudarte a lograrlo. Por ejemplo, una mayor frecuencia cardíaca ayuda al cuerpo a transportar más sangre oxigenada al cerebro, de modo que pueda encontrar una solución rápida a los problemas que le están causando estrés. Escriba sus pensamientos y sentimientos más profundos asociados con su estrés. Esto lo ayudará a comprender el origen para poder abordarlo. Por ejemplo, no tiene mucho sentido hacer meditación todos los días para desestresarse si la causa de su estrés es el exceso de trabajo. En este caso, hablar con su jefe o colega para ajustar su carga de trabajo ayudará más a aliviar su estrés que las actividades relajantes. Piense fuera de la caja. Cuando estamos estresados, podemos pensar que solo ciertas actividades (como la meditación o el ejercicio) pueden ayudarnos a relajarnos. Pero hablar con amigos y familiares, o usar una aplicación o un recurso en línea, podría ser una mejor manera de abordar su estrés y ayudarlo a sentirse mejor.

2. Te preocupás por el qué dirán La mayoría de nosotros tenemos algo que nos apasiona, ya sea nuestro trabajo o incluso un pasatiempo. Pero la razón de la motivación es importante. Algunas personas persiguen su pasión porque quieren, ya sea para mejorar o aprender una nueva habilidad. Pero otros solo pueden perseguir su pasión porque quieren el reconocimiento de otras personas. Las personas con ciertos tipos de personalidad pueden ser más propensas a obsesionarse con su pasión. Otros pueden simplemente seguir una determinada actividad para obtener elogios de sus colegas o incluso para demostrar su valía a amigos o familiares. El problema de perseguir una pasión por la razón equivocada es que puede hacer que una persona se esfuerce hasta el límite, lo que podría significar trabajar a pesar de estar enfermo o no tomarse un tiempo libre para desestresarse. Esto puede hacer que sea difícil y estresante relajarse, como si estuviera perdiendo el tiempo que podría dedicar a perseguir su pasión cuando trata de hacer cosas relajantes. Incluso podría estar preocupado de que la gente piense mal si se toma un tiempo libre. En última instancia, esto puede afectar negativamente el bienestar. Para las personas que se sienten así, puede ser útil tomar un breve “descanso mental” de lo que les apasiona. No tiene que ser largo, ni tiene que implicar hacer algo que necesariamente le parezca relajante. Pero tomar descansos, incluso breves, puede ayudarlo a sentir que está bien tomarse un tiempo lejos de su pasión de vez en cuando para desestresarse y relajarse.

3. No puedes decidirte al tomar una decisión, algunas personas no pueden evitar explorar todas las opciones posibles disponibles para ellos, lo que se conoce como maximizar los pensamientos. Esto incluso puede suceder cuando se trata de elegir algo relajante para hacer. Incluso después de elegir algo, es posible que pienses en las otras opciones y te preguntes si algo más te habría ayudado a sentirte más relajado. Entonces, en lugar de relajar tu mente, te estás estresando aún más. Desafortunadamente, la maximización conduce al arrepentimiento de la autoculpa, sin importar la opción que elijamos. A veces también se asocia con menor bienestar. Para una persona que tiene el hábito de maximizar, puede estar pensando en todas las otras cosas que tiene que hacer ese día en lugar de relajarse, lo que puede generar sentimientos de estrés.

–Limite la cantidad de decisiones que debe tomar el día que desea hacer algo relajante. O incluso planifique cuándo va a hacer algo relajante (como ver una película o meditar) y cuánto tiempo va a hacerlo. Esto puede hacer que sea más fácil relajarse cuando llegue el momento, ya que sabrá que no está postergando otras cosas.

–Recuerde por qué está tratando de relajarse. Su salud es importante, por lo que recordar esto puede ayudarlo a sentirse menos estresado mientras intenta realizar una actividad relajante. Si bien la relajación puede causar ansiedad, puede tener un efecto positivo en la salud mental e incluso ayudarlo a crecer como persona.

Lo más importante es encontrar una actividad relajante que la persona disfrute ya sea cocinar, correr o hacer jardinería. Tareas fundamentales para desenchufar y desconectar del estrés diario.

FUENTE: lanacion.com